El trabajo flexible y el coworking no son solo cosa de millennials

Los trabajadores de distintas generaciones valoran diferentes aspectos de un espacio de trabajo flexible. Los resultados de este estudio global muestran que la generación nacida antes de 1964 prioriza los beneficios de la productividad, mientras que aquellos nacidos después de 1980 prefieren los aspectos creativos y la oportunidad de nuevos proyectos.

Los resultados del estudio sugieren los siguientes datos:

• La mayoría de las personas nacidas después de 1980 ven el trabajo flexible como una oferta para nuevas oportunidades de trabajo y de nuevos proyectos (67 %), en comparación con aquellos nacidos antes de 1964 (55%).
• Las generaciones nacidas a partir de 1980 están más preocupadas (67 %) por estar en un ambiente de trabajo inspirador que aquellos nacidos antes de 1964 (58 %).
• Solo el 55 % de los nacidos antes de 1964 piensan que las ubicaciones de trabajo a distancia ofrecen un entorno más creativo que una oficina regular, en comparación con el 68 % de los nacidos a partir de los años 80.

Un análisis adicional de lo que inspira a la productividad en el entorno de trabajo reveló lo siguiente:

• El 23 % de los nacidos más allá de 1980 creen que contar con refrescos en la oficina ayuda a aumentar la productividad, en comparación con el 13 % de los nacidos antes del 64.
• Sin embargo, en una tendencia inversa, las generaciones nacidas después de 1980 le dan menos importancia al wifi (78 %), en comparación con aquellos nacidos antes de 1964 (85 %).

Ahora más que nunca, la era digital ha permitido que personas de todas las edades trabajen a distancia, lo que a su vez ha aumentado la demanda de espacios de trabajo flexibles. Sin embargo, las últimas cifras del estudio que ha elaborado Spaces muestran que los nativos digitales necesitan mayor interacción con otras personas. De hecho, el 59 % de los profesionales nacidos de 1980 en adelante cree que gracias a la interacción con otros profesionales en espacios de trabajo flexible son capaces de mantener actualizadas sus habilidades, en comparación con el 42 % de aquellos que nacieron antes de 1964.

Por su parte, los empresarios ven cada vez más la estrategia de espacios de trabajo flexible como un medio para convertirse en un buen empleador:

• El 72 % de los nacidos después de 1980 piensan que el trabajo flexible ayuda a motivar a los trabajadores, lo que supone un aumento del 10 % en comparación con los nacidos antes de 1964.
• Además, el 84 % de los empleados nacidos a partir de 1980 creen que el trabajo flexible ayuda a las empresas a contratar y retener al mejor talento, en comparación con el 75 % de los nacidos después de 1964.​

Philippe Jiménez, Country Manager de Spaces en España, señala: “La creatividad y la colaboración pueden revitalizar a una empresa y potenciar a empleados de todas las edades. Compartir nuevas ideas y conocimientos entre generaciones, así como entre equipos, tanto de manera informal como formal mediante actividades tales como la tutoría inversa, permite a otros ver las cosas desde una perspectiva diferente y genera nuevas ideas”. Y añade: “Diferentes generaciones podrían ver algunos aspectos de la oficina de manera distinta. Los empleadores inteligentes encontrarán una forma de garantizar que todas las generaciones puedan contribuir con sus mejores ideas en beneficio de la empresa y creadores similares”.​

Según la psicóloga certificada Denise Taylor: “En el trabajo existe un contrato psicológico entre nosotros y nuestro empleador. No se trata solo de una relación financiera. Los empleadores tienen que relacionarse con el personal de diferentes maneras, y parte de esto es descubrir lo que funciona con los grupos de todas las edades. En todos los sectores necesitamos inspirarnos para pensar en soluciones creativas y buscar formas de expandir nuestra red empresarial. En un espacio de trabajo compartido como Spaces, puede conocer a personas de diferentes edades y orígenes, con un conjunto diverso de experiencias de las que podemos aprender”. Además, comenta: “Cada generación aporta un conjunto de habilidades únicas a la empresa: en el caso de los baby boomers, su fortaleza y experiencia; y en el caso de los millennials, a menudo es su creatividad. Combinar los dos elementos nos brinda una nueva perspectiva que nos permite crear trabajos ‘significativos’, donde podemos enfocarnos apropiadamente en la tarea disponible y concentrarnos sin distracciones”.